El equipo porriñés sacó un valioso empate en una pista muy complicada como la del Aula Alimentos de Valladolid
29.- Aula Alimentos de Valladolid: Carmen Sanz, Elva Álvarez (2), Bea Puertas (7), Iara Grosso (1), Ángela Nieto (6), Lourdes Guerra, Agustina López (2), Joana Bolling (2), Teresa Álvarez (1), Yunisleidy Camejo (3), Elena Cuadrado (2), Ana Viloria (3) y Rafaela Taide.
29.- Conservas Orbe Porriño: Fátima Ayelén, Ana Cerqueira (4), Ana Alonso (2), Bárbara Cerqueira, Alicia Campo (1), Inés Hernández (4), Soraia Lopes (4), Aitana Santomé (1), Andrea Dapena, Alba Dapena (4), Anthía Espiñeira (5), Sandra Fernández, Iasmin dos Santos, Nagore Sáenz, Fátima Suaré (4) y Begoña Otero (p.s.).
Marcador cada cinco minutos: 3-2; 5-4; 9-8; 11-9; 12-11; 16-13; Descanso; 19-15; 19-20; 23-24; 23-27; 26-27; 29-29.
Árbitros: Tania Rodríguez y Lorena García. No excluyeron a ninguna jugadora por parte del Aula Alimentos de Valladolid. Por parte del Conservas Orbe Porriño, excluyeron a Ana Cerqueira, Inés Hernández, Alba Dapena y Anthía Espiñeira.
Incidencias: Partido correspondiente a la séptima jornada de la Liga Guerreras Iberdrola disputado en el Pabellón Huerta del Rey de Valladolid.
El Conservas Orbe Porriño sumó un valioso empate en su visita al Aula Alimentos de Valladolid en un encuentro con muchas intermitencias en el marcador, que llegó a ser un tanto caótico en determinados tramos del mismo debido a los distintos ritmos de juego que plantearon ambos bloques, pero que se acabó decidiendo con un justo empate que, por otro lado, no aleja demasiado a ninguno de los dos equipos de la zona baja de la clasificación.
El partido transcurrió por un desorden equilibrado, en el que ambos conjuntos plantearon su esquema de juego desde un principio y no lo abandonaron en ningún momento, obteniendo así momentos de éxito y fracaso que equilibraban la balanza y reajustaban las diferencias en el marcador hasta un empate final que acabó siendo lo más justo.
Comenzó mejor el partido el Aula Alimentos de Valladolid, que impuso su frenético ritmo de juego para mandar en el electrónico en los primeros compases.
Apoyadas en una férrea y móvil defensa y en una primera oleada letal, el bloque vallisoletano dominó al Conservas Orbe en esta faceta, que se veía incapaz de defender las rápidas transiciones del Valladolid, ya fuese tras gol o fallo visitante.
De este modo, las primeras ventajas fueron para las locales, aunque a pesar de hacer valer su alto ritmo de juego, vieron como el Conservas Orbe Porriño supo mantener la calma para no dejar que esas ventajas aumentasen lo suficiente, manteniendo a raya al bloque vallisoletano en todo momento.
El único momento en el que el Valladolid tomó algo más de ventaja fue en el tramo final del primer acto, al que se fue en el marcador con un 16-13 a su favor, dejando aun así todo por decidir para la segunda mitad.
La segunda parte se inició con dos tramos de cinco minutos muy diferenciados. Comenzó mandando de nuevo el Valladolid, pero del minuto 35 al 40, el Conservas Orbe Porriño supo darle la vuelta al electrónico de manera excepcional, pasando de un 19-15 a un 19-20 que daba alas a las pupilas de Isma Martínez.
Esta buena racha del conjunto porriñés no se detuvo ahí, sino que el Conservas Orbe siguió apretando los dientes e imprimiendo intensidad tanto en defensa como en ataque, para lograr adquirir la mayor ventaja favorable del encuentro en el minuto 50 (23-27).
A pesar de esta diferencia de 4 tantos a falta de 10 minutos para la finalización del duelo, el Valladolid no se dio por vencido, y volvió a tirar de garra para igualar el duelo en los instantes finales, que a su vez fueron de infarto.
Con ambos equipos siendo conscientes de todo lo que estaba en juego, los últimos minutos se jugaron con mucho respeto y tensión, en donde el Conservas Orbe Porriño supo mantener la calma para, con una jugadora menos, lograr el empate a 29 tantos y defender el último ataque vallisoletano.