El equipo porriñés plantó cara durante todo el encuentro a uno de los ‘cocos’ de la competición, pero no pudo afinar en momentos clave para puntuar
25.- Conservas Orbe Porriño: Fátima Ayelén, Ana Cerqueira (4), Ana Alonso, Bárbara Cerqueira, Alicia Campo (2), Inés Hernández (1, Aitana Santomé (2), Andrea Dapena, Alba Dapena, Anthía Espiñeira (9), Laura Magdaleno, Sandra Fernández (6), Iasmin dos Santos, Nagore Sáenz (1), Fátima Suaré y Begoña Otero (p.s.).
29.- Rocasa Gran Canaria: Silvia Navarro, Melania Falcón (2), Arinegua P., Paula V. (6), Lisandra L. (10), Georgina R., Alba C. (2), Haridian R. (5), Tiddara T. (2), Katarina T. (1), María G., Kinga G. (1), Ana Belén P. y Yuli Dacil.
Marcador cada cinco minutos: 4-2; 7-4; 10-8; 11-10; 13-12; 14-15; Descanso; 14-18; 15-20; 18-22; 22-24; 24-26; 25-29.
Árbitros: Sergio Rodríguez y Andrés Rosendo. Excluyeron, por parte del Conservas Orbe Porriño, a Ana Cerqueira y Bárbara Cerqueira. Por parte del Rocasa Gran Canaria, a Paula Valdivia, Lisandra L., Haridian R., Katarina T. y Kinga G.
Incidencias: Partido correspondiente a la octava jornada de la Liga Guerreras Iberdrola disputado en el Pabellón Municipal de Porriño. Gran entrada en el municipal porriñés.
El Conservas Orbe Porriño no pudo sumar en el duelo ante el Rocasa Gran Canaria en un partido cuya tónica general fue muy igualado, y que se tuvo que decidir del lado visitante por pequeños detalles traducidos en errores de lanzamiento y de pase en momentos clave por parte del bloque local.
Comenzó de manera fulgurante el Conservas Orbe, alentado por el gran ambiente que se vivía en el Municipal porriñés, así como por el juego clarividente, tanto en defensa como en ataque, de las pupilas de Isma Martínez, que plantaban cara al Rocasa Gran Canaria en los primeros minutos, logrando escaparse en el marcador en apenas 10 minutos (8-4).
Pero el Rocasa Gran Canaria no está en los primeros puestos de la clasificación por casualidad, y es que el bloque canario aprovecha cada error del rival para hacer daño en cada acción. Tanto es así, que el encuentro pasó de un ilusionante 10-5 favorable al Porriño, a un 10-9 que volvía a meter a las canarias en el encuentro.
Esta ‘mini’ remontada se produjo simple y llanamente por contraataques ejecutados a la perfección, después de que el Conservas Orbe encadenase varias acciones consecutivas de errores de lanzamiento y pase, lo que propició que el duelo se igualase una vez superado el ecuador de la primera mitad.
A partir de ahí, cuando ya se entraba en el final del primer acto, el Rocasa Gran Canaria metió una marcha más en sus acciones, y logró incluso darle la vuelta al marcador en los últimos minutos, marchándose al descanso con un 14-15 favorable.
La segunda mitad fue un encuentro mucho más abierto de principio a fin. Comenzó más enchufado el Rocasa Gran Canaria, que encadenó una serie de acciones positivas en ataque para adquirir ciertas ventajas que las situaron hasta 4 tantos por encima en apenas 5 minutos (14-18).
Parecía que las canarias habían puesto la directa hacia la victoria a domicilio, pero el Conservas Orbe Porriño no perdió la fe, y la defensa 5-1 planteada por Isma Martínez comenzó a dar rápidos resultados. Poco a poco, el Porriño fue remontando goles para volver a igualar el partido cuando restaban 10 minutos para su finalización.
En ese tramo final, entró en juego la experiencia del Rocasa, que unida a las imprecisiones del Conservas Orbe en algunos ataques clave, acabó decantando el encuentro del lado visitante a pesar del buen partido realizado por las porriñesas.